domingo, 6 de noviembre de 2011

Pequeñeces...

Cuando era niña/pequeña/una criaturita minúscula... mi bisabuela me daba chocolates de esos chiquitos, uno por día salvo que nos portáramos mal... un día con mi hermano le "descubrimos" la caja y sacamos 3 cada uno, pensando que no se iba a dar cuenta... nos descontó los chocolates de 3 días, agregando días por "portarse mal". Era una genia la Nona...
También, entre mis 7 años y no sé bien qué momento... quise ser astrónoma. Tanto que cada vez que nos mandaban a "investigar" algo en la escuela yo "investigaba" el sistema solar y esos menesteres... Para mi cumpleaños de 9 le pedí a mi tío que me regalara libros de planetas, todavía se ríe del asunto, pero me los regaló y yo fui feliz... 
Me encantaba leer y fui vista como una ñoña toda mi infancia -y adolescencia habría que decir- (con argumentos francamente...) pero en ese momento parece que me gustaba serlo... 
Usaba lentes... desde los 5 hasta los 18 años -momento en que los perdí y nunca más me volví a acostumbrar a usarlos-. Eso me hizo acordar: me encantaba la revista Anteojito... 
Jugaba a que la mesa del laboratorio de mi abuela era una nave espacial, entonces mientras ella trabajaba yo me sentaba en una maderita que tenía la mesa y manejaba... hasta que dejé de entrar abajo de la mesa... 
También me salían las maldades... con mi hermano hacíamos como que hablábamos en "inglés", sin saber hablar obviamente, y mi prima lloraba porque no nos entendía.... jeje.
A los 9 años me "enamoré" por primera vez -que yo recuerde....- me habían cambiado de escuela y como era la nueva me hicieron pasar a izar la bandera. Mi compañerito de curso Juani me dijo cuando volví: "que bien que izaste la bandera" y yo caí estupidizada... siempre me resultó medio increíble saber el momento exacto en que me empezó a gustar ese niñito. Me volví a cambiar de escuela y lloraba porque mis 9 años estaban absolutamente convencidos de que él era el amor de mi vida... 
Ah... en 5to grado me enamoré del maestro "practicante" y todo el curso me gastaba porque se ve que era medio evidente la muchacha... 
Mi barbie favorita era una que tenía el pelo rojo y hasta los pies... siempre me quise teñir de ese color pero me faltó coraje... 
A los 12 años casi me ahogo en la pileta del club al que iba... pero casi me ahogo en serio! una niñita loca que no sabía nadar se me subió al cuello y yo no me la podía sacar de encima... nos tuvo que sacar el "bañero" como le decíamos en esos momentos... me acuerdo cada instante como si hubiera pasado hace un rato nomas... me acuerdo que creía que me moría y que si hubiera podido mi instinto hubiera hecho que matara a esa pendeja del demonio... después de eso nunca pude disfrutar del agua de la misma forma... creo que el miedo que te deja una situación así no se va muy fácilmente... 

Ustedes? de qué anécdotas se acuerdan?
Besos

12 comentarios:

  1. yo tmb queria ser astronoma...me la pasaba leyendo libro sobre eso y el anteojito obvio...
    tanto me gustaba que en el cuartito de atras de mi casa pinte un sistema sola gigaante en la pared,..todavia esta

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  2. Qué divina Viole!!! morí de ternura!!! (yo hacía planetas con pelotitas de telgopor pintadas o tapadas con lanas... y mi abuela me tejió los anillos de saturno para agregarle!! jeje)

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  3. Me encantó leer la palabra "niñito". Yo la uso acá y se me cagan de risa. Y yo leía todo el tiempo. Cuando mi nono supo, porque me vio, que sabía leer, llegaba los domingos y me prestaba una parte del diario para que leyéramos juntos. Era más bien ñoña, pero los que no fueron "ñoños" en mi curso, no llegaron tan lejos, así que no me arrepiento.

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  4. Aguante la palabra niñito Crai!!! jeje. Pero por qué se cagan de risa?? qué le pasa a esa gente??
    Genial no arrepentirse de la propia ñoñez... hay que llevarla con la frente alta o cambiar de rubro... ja.
    Besoss

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  5. Mi mamá me enseñó a leer a los 5 años. Cuando mi abuelo se enteró no tuvo mejor idea que regalarme "Allá lejos y hace tiempo" de Guillermo Hudson. Un mamotreto que aunque lo intenté de más grande me fue absolutamente imposible digerir.

    En la primaria, digamos de los 8 o 9 años en adelante, me gustaba leer libros que tuvieran que ver con la "aventura del átomo". Evidentemente ya a esa edad estaba marcada la carrera que iba a seguir. Sabía poco sobre la parte política de la Segunda Guerra Mundial, pero conocía al dedillo todos los pasos que se dieron en el desarrollo de la bomba atómica.

    También me gustaban los libros de El Príncipe Valiente y los de Julio Verne.

    Siempre quise llegar a fin de año sin faltas a la escuela. Pero gripes, anginas, bronquitis, etc., se confabularon en mi contra para frustrar ese objetivo. Finalmente lo logré en sexto grado. Fuimos tres en toda la escuela.Los otros dos recibieron libros de El Príncipe Valiente. Yo, Facundo, de Sarmiento. Nunca entendí por qué no haber faltado en todo el año merecía un castigo. Sigue arrumbado junto con el de Hudson.

    Durante la adolescencia me dediqué a hurgar en la biblioteca que había en casa. Siendo mi padre egresado del Buenos Aires, la cantidad de libros era interesante. Me fascinaron los de Archibald Cronin, un autor irlandés que contaba las típicas historias de irlandeses. Y los de Enrique Jardiel Poncela, un español que se adelantó a su tiempo. Su humor parece sacado de las ya fenecidas revistas Humor Registrado o Satiricón o de CQC.

    Luego seguí creciendo.

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  6. jajaja genial!
    no me acuerdo muchas :s

    con mi prima haciamos lo mismo de hablar en "ingles" era cualquiera pero nos creiamos mil..

    desde que recuerdo hasta q termine la primaria me gusto el mismo chico, practicamente desde los dos años mis noviecitos eran él y otro nene mas.

    en la casa de una de mis abuelas siempre jugabamos a hacer obras de teatro, yo siempre me disfrazaba de novia con el vestido del civil de la prima de mi papa q no se xq lo tenia mi abuela, era lo mas eso. siempr me extrañó xq eso lo hacia en la casa de una y no de la otra.

    q geniales recuerdos del a infancia

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  7. Hasta los 5 años mis padres me llevaban a un club del Tigre. A mi padre le gustaba mucho remar. En la pileta conocí a Alicia, de mi misma edad. Era la heredera de la empresa de lácteos Kasdorf, una de las más importantes de la época. Pero luego nos alcanzó la crisis (una de las tantísimas que hemos vivido) y nunca más fuimos al Tigre. Romance prematuramente truncado por injerencia paterna.

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  8. Hola Mario, Jose: que lindas sus anécdotas!
    Jose: me siento menos loca ahora que sé que compartíamos hacernos las locas con el inglés, jajaja. me encantó lo del disfraz de novia!
    Mario: me imagino la decepción al ver los libros de los otros y el que te dieron a vos... pobrecito!!! que bajón para el pequeño mario... que pena el romance truncado che! de niños esas cosas escapan a nuestro alcance desgraciadamente... (yo que soy mala me imaginé a la pobre alicia llorando por su amor truncado, jeje).
    Besos

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  9. Recuerdo que una vez me regalaron una Barbie y nunca la saqué de la cajita porque las odiaba y mi mamá la terminó regalando.

    El primer libro "serio" que leí fue "Principe y mendigo" de Mark Twain.

    Mi color favorito desde que tengo uso de razón es el blanco.

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  10. Juliii no te puedo creer!!! yo las amaba!! jeje.

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  11. Yo me acuerdo que de chico quería estudiar medicina... Hice varias "pequeñeces" como por ejemplo: Desarmar una tele para dejarle una imagen fija a mi tío (muy virtual lo mio), pero siempre fui amante de la música, rompí un proyecto de mi abuelo hecho con madera para hacerme una guitarra.. la infancia es algo muy lindo, pero me sigo sintiendo igual! ;D

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  12. Hola Mauro: bienvenido! qué tremendas tus pequeñeces! jeje. Y que bueno que te sigas sintiendo igual!
    besos

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